GUSTO POR LA EDUCACIÓN Y LA PEDAGOGÍA
Miércoles, Agosto 26, 2020
Aida Josefina Rojas es doctora en ciencias de la educación de la Universidad del Cauca graduada en el 2015 y actual docente de la Universidad del Valle.

Aida Josefina Rojas es doctora en ciencias de la educación de la Universidad del Cauca graduada en el 2015, Magister en Educación: desarrollo humano de la Universidad San Buenaventura de Cali, especialista en Docencia Universitaria y Terapeuta Ocupacional de la Universidad del Valle. Actualmente es docente nombrada de la Universidad del Valle, institución donde hasta hace poco también fue la Directora del Programa Académico de Terapia Ocupacional.

Aida comenzó a trabajar como profesora en la Universidad del Valle en el año 2004 y en el desarrollo de su labor sintió que era necesario adquirir más elementos como docente, por ello realizó la especialización en Docencia Universitaria. Luego aceptó el cargo administrativo de directora del Programa Académico de Terapia Ocupacional, labor que no solo le gustó, si no que hizo que finalmente se apasionara por la educación y la pedagogía. Es así, como su recorrido como docente no ha implicado que se aleje de la terapia ocupacional, sino que por el contrario ha hecho que también se apasione por ella desde un concepto mucho más pedagógico.

“Afortunadamente, soy profesora nombrada en la Universidad del Valle y puedo tener privilegios como el tiempo de comisión académica o el tiempo de dedicación que la universidad nos da, además es la misma institución quien pagaba la beca, es decir la Universidad del Valle le pagó la Universidad del Cauca todo lo que tenía que ver con matrículas, desplazamientos y eventos” explica Aida sobre los beneficios que tiene como docente de Univalle y que le permitieron realizar el doctorado en Ciencias de la Educación.

Aida manifiesta que de la docencia le llama la atención la parte curricular, pedagógica y didáctica. Es por ello que, al leer el pensum del Doctorado en Ciencias de la Educación de la Universidad del Cauca, se dio cuenta que en este programa de posgrado se desarrollan estos temas; aspecto, que sumado a la trayectoria y la calidad que posee Unicauca, la motivó a inscribirse. “Realizar este doctorado significó una realización total y personal, cuando empecé a trabajar en la Universidad, uno no se proyecta llegar a un nivel doctoral por el tiempo, el dinero y muchas otras cosas, es un sacrificio muy grande. Sin embargo, cuando uno lo logra hacer, siente la satisfacción del deber cumplido” reconoce Aida, quien también agrega que este proceso implicó un gran esfuerzo, ya que debía viajar aproximadamente cada dos meses de Cali a Popayán por un mes para recibir las clases, lo que implicó separarse continuamente de sus hijos y esposo.

Después de terminar el doctorado en el 2015, continua como su trabajo docente hasta febrero de 2016, cuando nuevamente toma el cargo de directora del programa académico de Terapia Ocupacional, cargo que ocupó hasta inicios de agosto del presente año. “Tuve que dejar el cargo porque estoy a puertas de subir de categoría, a docente titular, y para poder hacerlo debo tener por lo menos un año solamente de docencia. Esa fue la sugerencia de Credenciales, que es la oficina donde hacen todo el estudio de la hoja de vida, así que era importante que me retirara un tiempo del área administrativa y poderme dedicar nuevamente solo a la docencia”, manifiesta ella sobre su trabajo actual.

Después de llevar 5 años de ser egresada, ella se siente muy agradecida con el doctorado porque considera que su trayectoria ha sido muy satisfactoria, porque pudo regresar a la dirección del programa académico de Terapia Ocupacional con unas nuevas bases que le permitieron trabajar en muchos elementos, como el montaje de la maestría en Terapia Ocupacional y poder liderar la reforma curricular de su programa, las cuales ya fueron aprobadas por las diferentes instancias de la Universidad del Valle, y se está a la espera de ser aprobada por el Ministerio de Educación.

En cuanto al montaje de la Maestría en Terapia ocupacional, esta llegaría a ser la primera en Colombia. “Esta maestría ya pasó por todas las instancias de la Universidad del Valle sin ningún cambio o requerimiento y en este momento estamos a la espera de la respuesta del Ministerio de Educación Nacional que nos de aval. Creo que los elementos que yo recibí en la Universidad del Cauca fueron muy amplios e importantes, dándome las herramientas necesarias para despegar en este sueño que no había sido fácil y que no habíamos podido consolidar, pero que finalmente me dieron las herramientas para poderlo hacer” agrega Aida sobre su labor en Univalle después de graduarse como doctora en Ciencias de la Educación.

Otro punto que ella menciona y que es importante, se relaciona en que lo adquirido en el programa doctoral le ayudó a forjar parte de un equipo, que se está consolidando, para la construcción de un doctorado en conjunto con la Universidad Nacional de Colombia. Un doctorado con el cual se esperar dar una visión y mirada integral a diferentes profesionales del país.

Para finalizar, en cuanto a su pasó por la Universidad del Cauca Aida manifiesta que “es una maravilla, siempre soñé con estudiar con la Universidad del Cauca, yo tengo familia en Popayán y cada que iba a Popayán y veía el Paraninfo, yo decía algún día tengo que estudiar en la Universidad del Cauca. Ser egresada de la Universidad del Cauca para mí es un orgullo y satisfacción total, quede muy contenta porque se cumplieron todas mis expectativas”.

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